Del 26 de abril de 1840 hasta el 26 de abril de 2025 han pasado 185 años en los que Alpedrete ha crecido y cambiado de forma considerable. Hoy la labor que afama al municipio se ha convertido en historia, las piedras en símbolo, las canteras en paisaje y el municipio en un lugar inigualable para vivir.
La historia de la localidad comienza mucho antes, incluso algunas investigaciones apuntan a la época de la prehistoria, pero fue a mediados del siglo XIX cuando se otorga su autonomía y se produce la fundación como municipio independiente. Los documentos históricos recogen que el primer alcalde fue Basilio Montalvo.
Desde entonces, la localidad ha incrementado su población en las últimas décadas superando la barrera de los 16.000 vecinos censados de forma oficial. Una población que aumenta en los meses de verano. El aumento de la demanda de vivienda por personas que han visto en la localidad una buena opción de desarrollo y por jóvenes que buscan en su municipio un futuro ha llevado a que actualmente se contabilicen más de 7.200 viviendas.
Ha crecido, pero siempre con el respeto a la tradición y la historia heredada sobre todo de su principal reclamo. Las canteras de Alpedrete fueron el motor económico del municipio durante décadas. Se extrajo piedra muy conocida y apreciada para la ejecución de obras monumentales de la Comunidad de Madrid como el Monasterio de El Escorial o el Palacio de Oriente. El trabajo en ellas y su explotación fue creando la fisonomía del pueblo tal y como hoy se conoce. Son parte de la identidad de la población. Así se reconoce en el documento de Canteras y Encharcamientos de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid, tras la inclusión de las canteras en el Catálogo de Humedales.
185 años después de su fundación, hoy Alpedrete es un municipio con buenos servicios, dos estaciones de tren, conexiones de autobús constantes con Madrid, una amplia oferta educativa con cuatro colegios públicos, uno concertado y otro privado, escuelas infantiles, un instituto de enseñanza secundaria que cumple 25 años, instalaciones deportivas, la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora que esconde una historia propia, la parroquia de Nuestra Señora del Carmen o la Ermita de Santa Quiteria donde espera la patrona de la localidad, el Centro Cultural Asunción Balaguer, un comercio y una hostelería desarrolladas, un centro de salud, parques y un entorno natural privilegiado con la Dehesa Boyal como principal muestra de ello. Por todo esto y mucho más… ¡Viva Alpedrete!
